Vivimos atrapados en una inercia de tareas, notificaciones y compromisos. Pero tu mente y tu cuerpo tienen un botón de reinicio: la pausa consciente.
¿Qué es una pausa consciente?
Es un minuto que te regalas para detenerte, respirar y reconectar contigo mismo. No se trata de “perder tiempo”, sino de ganar claridad y energía.
Cómo hacerla en 3 pasos sencillos:
- Detente: apaga la pantalla, baja el teléfono o deja lo que tengas en las manos.
- Respira: inhala por la nariz contando hasta 4, exhala por la boca contando hasta 6.
- Observa: nota lo que ves, escuchas y sientes en ese momento, sin juzgar.
Beneficios inmediatos:
- Disminuye el ritmo cardíaco.
- Relaja los músculos tensos.
- Te ayuda a responder con calma en lugar de reaccionar por impulso.
Un minuto puede parecer poco, pero si lo haces varias veces al día, empezarás a notar que las cosas que antes te alteraban pierden fuerza.Reto de hoy: antes de cerrar esta lectura, mira a tu alrededor, haz una respiración profunda y pregúntate: “¿Cómo me siento ahora?”. Ese es el inicio de tu ritual diario.